Mañana es el día, estoy un poco nerviosa, la verdad. Fui a cenar espaguetis con tomate mi comida favorita, pero noté a mis padres raros. No hablamos durante toda la cena. Después me fui dormir al piso de arriba, con una sensación depresiva. Al subirme escuché la conversación de mis padres. Era así el diálogo:
Mamá.- Tiene el gen.
Papá.- Ya, no sé qué vamos a hacer, espero que no le pase lo
mismo que a su abuelo.
Mamá.- Tengo miedo, cariño.
Papá.- Yo también, vamos a intentar protegerla.
Me fui con
ansiedad a mi habitación. Mi cabeza se estaba revolviendo de pensamientos y me
hacía miles de preguntas, como por ejemplo: ¿De qué gen están hablando?, ¿Quién
es mi abuelo?, ¿Por qué tienen miedo?
Ahí estaba yo, a las tres de la mañana preguntándome las
mismas preguntas continuamente. Como no podía dormir, decidí empezar a
investigar en internet. Empecé buscando mi apellido. Después de investigar me
salió una noticia de desaparición de un tal James Hunter, que había
desaparecido en el año 1986. Esta decía: James
Hunter, un hombre de cuarenta años, desapareció. La última frase que escuchó su hija fue esta: “Yo no
pertenezco a este mundo, me tengo que ir”.
Miles de escalofríos recorrieron mi cuerpo, ¿pertenezco a
este mundo? ¿voy a perder la cabeza? Estaba demasiado confundida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario